Diana Junk

¿Veinticuatro muertos en accidentes de tránsito en Yaracuy no son ya motivo suficiente para que las autoridades regionales declaren una verdadera emergencia? Con esta reflexión, comienza un nuevo balance sobre la crítica situación vial en la entidad. El diario regional Yaracuy al Día ha llevado un registro extraoficial tanto del número de accidentes como de fallecidos por siniestros viales en el estado. Según el medio, hay jornadas en las que se reportan hasta tres accidentes en menos de una hora, un comportamiento que mantiene en alerta permanente a la población. De acuerdo con estas cifras, noviembre cerró con 24 fallecidos: 18 hombres, 6 mujeres y 2 adolescentes. La estadística excluye a la numerosa cantidad de heridos, muchos de los cuales permanecen hospitalizados en el área de Traumatología del Hospital Central Plácido Daniel Rodríguez Rivero de San Felipe, un servicio que continúa colapsado, como es de conocimiento público. Los siniestros se registraron en 10 municipios del estado Yaracuy. Sucre, Peña, Manuel Monge, Nirgua e Independencia contabilizaron un caso cada uno; Bruzual, Bolívar y Páez, dos cada uno; San Felipe registró cinco y Cocorote encabeza la lista con ocho accidentes, especialmente en la autopista Centro-Occidental Rafael Caldera, en los sectores San Jerónimo y Jaime. Ante este panorama, la población yaracuyana se pregunta: ¿No son estas cifras suficientes para que el gobernador y las autoridades militares y policiales declaren una emergencia en materia de seguridad vial? La preocupación crece, particularmente por la alta incidencia de unidades motorizadas involucradas y por el número de jóvenes que están perdiendo la vida o quedando con lesiones permanentes. Muchos ciudadanos consideran que se ha llegado a un punto crítico en el que la paciencia social comienza a agotarse, debido a la ausencia de acciones contundentes y del estricto cumplimiento de la ley que permita frenar este flagelo que enluta, cada vez más, a las familias yaracuyanas. #noticiasregionales #Yaracuy #Venezuela #transito #Información

Quienes hoy condenan una posible intervención militar, no dicen nada de cuando Chávez bombardeo a Caracas, resultando es más de un centenar de personas fallecidas https://blossom.primal.net/c339d7de1f9026a2406be8965863faf99282a7d4300fa03c580335fd4cb6dced.mp4

Hoy se cumplen 16 meses desde que Freddy Superlano fue encarcelado sin razón. Dieciséis meses sin poder ver a su hija, sin abrazar a su esposa, sin contacto con el mundo exterior. Lo mantienen aislado porque le temen: temen a su ejemplo, a su arraigo en Barinas, a la fuerza de quien no negoció nunca sus convicciones y lideró desde su espacio la lucha contra la dictadura. Freddy no está preso por un delito, está preso por haber ganado, por defender el derecho de su pueblo a decidir, por no doblegarse ante el chantaje del poder. Y mientras su celda permanece cerrada, nosotros seguimos firmes en la exigencia de su libertad. No nos rendiremos y no nos callaremos

Está realidad la viven todas las familias venezolanas. El hambre es una política d Estado del régimen dictatorial de Maduro

En Venezuela 3 millones de niños quedaron fuera del sistema escolar por falta de recursos. Un país que abandona sus niños, no solo abandona su alma, se coloca a espaldas del futuro. Es una emergencia nacional

El agua se volvió un privilegio en un país lleno de ríos y represas. La carencia del vital líquido se situa en un 70%. Diversas ciudades. y poblados reciben en forma irregular de dos a tres días por semana; y otros menos afortunado pasan hasta 15 días sin el servicio. La sed es también política de Estado de la dictadura

Un país a oscuras no puede producir, no puede trabajar, no puede atender emergencias; es un país fantasma Diariamente los apagones duran desde 4 hasta 12 horas. La oscuridad es una política de Estado de la dictadura.

En Venezuela la comida da se volvió un lujo. La Canasta básica se situa en $ 500 Vs salario minimo en menos de 1 $ al cambio. Es un símbolo del desastre alimenticio. El hambre es también una política de Estado en Venezuela.

La diáspora nos es una estadística, es la cronología de un país rico en ruinas por causa de la dictadura, una herida abierta a la democracia mundial. Una de cada tres familias depende económicamente de las remesas para poder comer y pagar servicios. La familia venezolana mantiene la comunicación solo mediante las pantallas. Más de 8 millones huyeron del colapso económico y social del país.

La dictadura de Maduro d destruyó la educación de raíz. Un país sin maestros es un país sin futuro, aulas vacías, sueños apagados. Esto es el resultado de años de miseria y abandono.

La educación en Venezuela se volvió un lujo de pocos. La deserción escolar y la fuga de educadores en masa forman un cóctel alarmante. La matrícula escolar cayó un 46% y el éxodo de educadores en un 72%. Un logro más de la dictadura de Nicolás Maduro

LA ANGUSTIA YA NO ES NUESTRA 🇻🇪 El cartel de los soles le hizo a Venezuela un daño que no se mide en cifras, sino en cicatrices: un vaivén emocional que sube, baja, se rompe, se recompone. Un país viviendo en montaña rusa sin cinturón de seguridad. Pero hay algo que debemos entender de una vez: La presión de este momento no es contra nosotros. Es contra ellos. La ansiedad, el insomnio, el temblor en las manos… No es del pueblo. Es de la tiranía cercada, vigilada, acorralada por fuerzas que ni ellos mismos conocen. Nadie sabe el cuándo, ni el cómo, ni el dónde. Y precisamente por eso la sorpresa es un arma… y no está de su lado. A nosotros nos toca otra cosa: estar alertas, seguir a quienes hablan con seriedad, guardar la calma y no regalarles nuestro miedo. Porque esta vez, los que sufren son ellos. Los que tiemblan son ellos. Nosotros solo esperamos… pero con la dignidad intacta. Resistan con inteligencia. Mantengan la calma. Esto se está moviendo. 🇻🇪

Remembranza.

Salve Reina! Madre de Dios, ruega por nosotros, Venezuela en oración. Dios con nosotros 🙏

Operación en marcha. Venezuela falta poco!